Fátima Gómez Fotografía | estilismo culinario
38
archive,tag,tag-estilismo-culinario,tag-38,ajax_fade,page_not_loaded,,side_area_uncovered_from_content,qode-child-theme-ver-1.0.0,qode-theme-ver-16.1,qode-theme-bridge,disabled_footer_bottom,wpb-js-composer js-comp-ver-5.4.7,vc_responsive

estilismo culinario Tag

El pasado mes de julio mi madre y yo hicimos un viaje a Asturias y Cantabria. Cuando organizamos el viaje teníamos muy claro que queríamos pasar un día en casa de Fede (pincha aquí Federica&Co) en Novales. Contacté con ella por mail, le conté lo que nos apetecía hacer y enseguida cuadramos las fechas. El domingo 2 de julio pasaríamos el día allí, haríamos un curso de cocina y dormiríamos en su preciosa casa preparada con mucho cariño para que los huéspedes puedan pasar la noche. El curso elegido fue el de cocina provenzal. Tanto mi madre como yo nos enamoramos de La Provenza en un viaje que hicimos a esa maravillosa tierra y queríamos revivir su deliciosa y variada gastronomía.     Como todo es tan bonito y fotogénico allí, hice muchísimas fotografías. Ya verán como hasta los animales que allí conviven saben posar ante la cámara con mucha maestría y profesionalidad jejeje!!. Es por ello que he decidido contarles mis 24 horas en Novales en varias partes. Hoy les contaré nuestra llegada allí, les presentaré a Fede y su “trupe” y les mostraré como es de maravillosa la casa. Otro día les hablaré del curso de cocina en el que tan buen...

Desde hace tiempo me rondaba en la cabeza la idea de hacerle a mi madre un reconocimiento personal por todo lo que ella ha significado y significa para mí. O sencillamente porque es mi madre y es lo que más quiero en este mundo. Pensé que la mejor manera de hacerlo era a través de una de sus pasiones, la cocina y fusionarla con mis fotografías gastronómicas. Estuve tiempo creando las fotografías en mi cabeza y por fin llegó el día en que nos pusimos las dos manos a la obra. Ella elaborando su deliciosa receta de tocinillo de cielo y yo haciendo un reportaje fotográfico sobre este postre que tanto le caracteriza. Reviviendo el olor a caramelo en la cocina, utilizando los moldes antiguos que tantas y tantas veces hemos desmoldado y riéndonos recordando algún que otro tocinillo que no ha cuajado pero que ha sido comido igualmente ;)     Mi madre es una cocinera fabulosa y son muchos los días en casa en los que hablamos de esos platos que ella nos hacía y que marcaron nuestra infancia y nuestra adolescencia. Platos como la “Ropa vieja dulce", “Sus albóndigas” que cada vez que entra alguien en la cocina, destapa el caldero...

Estamos en una época del año en la que pasamos más tiempo en casa, ya sea porque hace más frío o porque las tardes son más cortas. Sea por el motivo que sea, estar una tarde en casa incita a tomar algo a media tarde o no?. A mí me encanta un té bien caliente y si está acompañado de un trocito de cake casero ya ni te cuento.     Aquí tienes una receta muy simple y archiconocida para este delicioso y esponjoso cake de frutos secos. La receta la adopté de mi abuela materna, Matilde, a la que cariñosamente le llamábamos Mamina. Ingredientes: 3 huevos 1/2 vaso de aceite de girasol 1 vaso de leche o un yogur 2 vaso de azúcar 3 vasos de harina 1/2 sobre de levadura seca Frutos secos al gusto (pasas, dátiles, orejones, arándanos, almendras, nueces...

Una de las cosas más bonitas que nos trae el otoño es la recogida de la manzana. Algo que me gusta mucho hacer los sábados, es ir a visitar los mercados agrícolas de los diferentes pueblos. En esta época del año hay muchos puestos llenos de manzanas. Los que más me llaman la atención son aquellos en donde las manzanas aparecen espléndidas junto a sus ramas y hojas. A los agricultores que atienden sus puestos les resulta curioso que yo elija algunas frutas que están dañadas o tienen desperfectos en su piel, incluso me miran con incredulidad. Pero eso para mí tiene un valor añadido, las hace ser piezas únicas, distintas e incluso más fotogénicas. En muchas de mis fotografías busco fotografiar las cosas tal y como son y esos “defectos” me ayudan a transmitir su propia naturalidad. A partir de ahí, mi cabeza empieza a pensar que podría hacer con ellas y a crear mis siguientes fotografías.    La tarta de manzana es uno de mis dulces preferidos. Cuando más me gusta tomarla es por la tarde a la hora de merendar. No es que meriende todas las tardes, no, no me puedo permitir esos lujos, ojalá!! Me gusta porque no...